Una rotura en la canalización de un edificio provocó vertidos directos a la calle Escoles Pies, generando hedor y quejas vecinales
Los vecinos y peatones de la céntrica calle Escoles Pies de Alzira ya pueden transitar con más tranquilidad. Durante semanas, la zona se vio afectada por una rotura en la canalización de aguas residuales en un edificio que provocaba vertidos de restos fecales en la vía pública y un persistente mal olor. Ahora, según fuentes citadas por LEVANTE‑EMV, el problema ha sido resuelto: las aguas sucias han dejado de encharcar la calle, aunque el hedor residual aún permanece.
Vertido y saneamiento
El origen del problema radicaba en una rotura del sistema de canalización en un edificio cercano que liberaba directamente residuos al pavimento. Los peatones denunciaban que la calzada se convertía en una auténtica “piscina” de aguas residuales acompañada por un olor intenso.
El Ayuntamiento intervino tras recibir múltiples quejas para evitar un mayor impacto en la salud pública y en la imagen del casco urbano.
Aunque el vertido ya se ha detenido, los residentes aseguran que el olor aún se percibe. No obstante, la retirada del encharcamiento representa una clara mejora en las condiciones de paso y en la movilidad peatonal de la calle.
Zona sensible y respuesta rápida
La calle Escoles Pies es una de las arterias más transitadas del centro de Alzira, por lo que la rotura del sistema no solo generaba molestias sanitarias, sino también un grave problema de convivencia urbana. El hecho de que el vertido fuera continuo aumentó la presión sobre las administraciones para intervenir.
Ahora, tras la reparación del tramo dañado y la limpieza de la zona afectada, los vecinos celebran que el problema no haya escalado a una alerta sanitaria mayor. El consistorio ha anunciado que reforzará la revisión de las redes de saneamiento en el casco histórico para evitar que se repitan incidentes similares.
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