El fuego se originó en la cabina del DJ y obligó a ventilar por completo el histórico edificio ubicado junto a la Cruz Cubierta
Un incendio registrado en la mañana del lunes en una de las discotecas más veteranas de València ha obligado a intervenir a los servicios de emergencia para controlar el fuego y ventilar el edificio. El suceso no ha causado heridos, pero sí ha generado importantes daños materiales, especialmente en la cabina del DJ, que ha quedado completamente destruida.
El humo invade todo el local
El incidente se produjo en un local situado en el número 305 de la calle San Vicente Mártir, junto a la conocida Cruz Cubierta. Según han informado fuentes del cuerpo de Bomberos de València, el fuego afectó directamente a la zona de la cabina del DJ y generó una densa humareda que se propagó por todo el recinto. Aunque la rápida actuación de los bomberos permitió controlar el incendio y evitar su propagación a otras áreas del edificio, fue necesario ventilar todo el espacio debido a la gran cantidad de humo acumulado.
Los motivos que originaron el fuego no han sido revelados por las autoridades, y por el momento se desconocen las causas exactas del siniestro. Afortunadamente, el incidente se produjo en un momento en el que el local se encontraba cerrado al público, lo que evitó daños personales.
Una sala con historia y polémicas
El local afectado por el fuego es un viejo conocido del ocio nocturno valenciano. Con décadas de trayectoria, ha pasado por distintas etapas y nombres, siendo recordado por muchos como Akuarela, una de las discotecas más populares de los años 80 y 90. En aquella época, además de sesiones de baile, la sala fue escenario de múltiples conciertos de bandas locales e internacionales, convirtiéndose en uno de los espacios culturales más activos de la ciudad.
Tras la etapa de Akuarela, la discoteca fue rebautizada en diferentes ocasiones, con nombres como Cormorán o Cream, y vivió tanto momentos de esplendor como épocas marcadas por la polémica. No fueron pocas las veces en que los vecinos del entorno denunciaron molestias por ruidos, peleas y altercados a la salida del local durante los fines de semana. Estas quejas generaron debates públicos sobre la convivencia entre el ocio nocturno y el descanso vecinal.
Desde hace dos años, el local opera bajo el nombre de Room y ha intentado reinventarse como un club exclusivo solo para adultos. Sus promotores apostaron por una estética y un servicio inspirado en los clubes más selectos de ciudades como Berlín, Londres o Nueva York, tratando de recuperar parte del prestigio que el lugar tuvo en décadas pasadas.
Con el incendio ya extinguido, los técnicos trabajan ahora en la evaluación de los daños y en determinar si la reapertura del club podrá producirse en los próximos días o si será necesario un cierre temporal para acometer reparaciones más profundas.
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